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Los termos eléctricos y de gas son los aparatos más comunes para calentar el agua en un hogar. Sin embargo, si comparamos el consumo de ambos, podremos observar cómo el consumo del termo o calentador eléctrico es mayor.
Para evitar que tu bolsillo se resienta lo mínimo, pon en práctica los siguientes consejos de ahorro energético a la hora de comprar tu termo eléctrico y utilizarlo.
4 consejos para escoger el mejor termo eléctrico
El termo eléctrico es uno de los electrodomésticos que consume más energía en una vivienda, sobre todo en los meses de invierno, donde aumenta la necesidad de agua caliente para ducharse, lavar los platos, limpiarse las manos, etc.
- Máxima eficiencia energética: si estás dudando entre dos calentadores eléctricos, lo más recomendable es decantarse por el que sea más eficiente, ya que será el que consuma menos energía. Para saber esta información, basta con que te fijes en su etiqueta de eficiencia energética, que muestra una escala que va de la letra A a la G, siendo la primera la que consume menos.
Tener un termo eléctrico eficiente significa que este cuenta con funciones avanzadas que le permiten realizar todas sus funciones, pero con diferencia a otros, lo hará con el menor consumo de energía. De ese modo, ahorrando energía, unos electrodomésticos eficientes pueden llegar a reducir hasta un 20 % la factura eléctrica.
- Tamaño: igual que sucede con cualquier electrodoméstico, cuanto más grande sea el termo, más consumirá. Por ejemplo, para un hogar en el que viven 3 o 4 personas, lo mejor es tener instalado un calentador con una capacidad de entre 50 y 100 litros.
- Pantalla digital: existen dos tipos de termos eléctricos en el mercado, los que vienen con una pantalla digital y los que cuentan con una analógica.
Siempre es más recomendable optar por uno con display digital, ya que tiene más precisión y puedes programar la temperatura a la que quieres mantener el agua. Con las pantallas analógicas es mucho más difícil ajustar la temperatura y cualquier fallo en su sistema puede producir un consumo mayor e innecesario.
- Resistencia blindada: ¿sabes cuál es el enemigo número 1 de los termos eléctricos? La cal, ya que se incrusta en el interior y hace que su vida útil disminuya. Por lo tanto, antes de comprar un aparato de estas características, es recomendable escoger uno que cuente con una resistencia blindada.
Las mejores prácticas para ahorrar con tu termo eléctrico actual
Si ya cuentas con un calentador eléctrico en casa y aún no tienes previsto sustituirlo, existen maneras de reducir su consumo y pagar menos por tu factura.
- Duchas cortas: según la OMS, una ducha diaria no debe alargarse más de cinco minutos para hacer un uso más sostenible del agua y la energía, y no superar los 100 litros por persona.
Una buena práctica para conseguir reducir tu tiempo en la ducha es cerrar el grifo durante el enjabonado. De esta manera, podrás ver cómo disminuye tu factura eléctrica.
- Programar: si sabes que en tu casa las duchas se realizan por la tarde, lo mejor es programar el termo eléctrico para evitar que el aparato esté manteniendo el agua caliente durante todo el día. Lo ideal para disfrutar del agua caliente al llegar a casa es programando el calentador 2 horas antes de ducharnos.
- Potencia contratada: ¿conoces la potencia que tienes contratada? Esta se trata del número de kilovatios (kW) que tiene tu suministro y determina cuántos aparatos eléctricos puedes tener enchufados al mismo tiempo.
Por ejemplo, si tienes una potencia muy alta, pagarás mucho más en tu factura eléctrica, por lo que es recomendable que la ajustes a tus hábitos de consumo.
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